¡Aaaah! Por fin, después de algunos meses de crisis existencial, laboral y creativa, después de enfrentarme a nuevos procesos, errores, aciertos, resultados sorpresivos, introspectivos, decepcionantes, emocionantes…aaahh! Les quiero presentar mi nueva colección. Para aquellos que pasan por primera vez por aquí, han de saber que una parte bien importante de este proyecto son las colecciones y trabajar por conceptos que me inspiran, que hablen de mi o de lo que veo y como lo interpreto.
La verdad es que uno nunca sabe de dónde vendrá la inspiración. Como lo hice evidente en las primeras líneas de este post, esta colección me sacó canas, busqué por todos lados esas musas de las que todos hablan y que ni trabajando se dignaban a venir, hasta que ( y esto va a sonar de lo más cursi, pero es real) volteé a ver hacia mi, lo que me gusta, lo que no, lo que sueño y cómo se vé, de qué color, con qué procesos… y encontré que lo que más deseo es seguir creando, experimentando, mancharme las manos y resolver piezas. Una vida muy simple pero llena de color y bonitez. Con hilos en el piso y retazos de tela por todos lados, con amigos, risas e ideas.
Así junto con las Lloronas, nacieron estas piecesitas (o piecesotas) en las que me di chance de experimentar con diferentes texturas, tiñendo la tela con té, café y colorantes, aplicando bordado y dando paso a la creación de patterns para cojines decorativos y playeras…uff! De verdad espero que la disfruten y que vayan a conocerla este domingo 26 de octubre al Bazar Condesa (Nuevo León 80 Col. Condesa, dentro de «Doméstico).
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